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martes, 29 de enero de 2008

LA MEDALLA



LA MEDALLA

La medalla de la Hermandad se compone de un fondo dorado con adornos de rocallas y ramos de rosas, uno a cada lado de la imagen de la Virgen, en plata, que sobresale en el centro sobre una pequeña peana.
El cordón que soporta dicha medalla es azul y blanco, de los colores de la Hermandad.
La medalla del Hermano Mayor no es igual. Esta medalla es la que tenía antiguamente la Hermandad de Triana, nuestra madrina. Esto viene de la primera imposición de la medalla al Hermano Mayor delante de la Virgen del Rocío en romería del año 1.943. El cordón de esta medalla es dorado.

HISTORIAS DE NUESTRA HERMANDAD

HISTORIAS DE LA HERMANDAD

En torno a la Hermandad rondan varias historias que se van contando de boca a boca y nunca se han escrito, por lo que son desconocidas para la mayoría de los hermanos de la Hermandad. Por ello, y para que nunca se modifiquen aquí están esas historias.

· La mano de plata


La historia de la mano de plata ocurrió sobre el año 1.970. Sobre ese tiempo “Rubillo el Pelao”, llamado José, era la persona que se dedicaba casi exclusivamente al cuidado del Simpecado a lo largo del año y sobre todo durante la romería del Rocío. Este hombre sufría una enfermedad en una mano. Ya le habían cortado un dedo y tenían que cortarle la mano entera porque la enfermedad iba avanzando, pero decidió operarse después de la romería de aquel año. Durante la romería, entre Pilas y Villamanrique de la Condesa, por la carretera un caballo hizo un movimiento muy brusco y extraño junto a los bueyes de la carreta del Simpecado, de tal forma que un buey se asustó arrastrando hacia un lado al otro buey. Como consecuencia de ello la carreta del Simpecado se volcó hacia un lado, intentando sujetarla “Rubillo el Pelao” con la mano enferma. La carreta estuvo pocos segundos en el suelo, ya que todos los peregrinos la pusieron en pie en seguida. El resultado de dicha caída fue algunos candelabros rotos. Milagrosamente no cogió a nadie debajo. Pero el milagro se produjo en nuestro hermano “Rubillo el Pelao”, a quién no le tuvieron que cortar la mano enferma porque se le puso bien. Este, en agradecimiento por lo sucedido, regaló una mano de plata, de unos 8 centímetros, al Simpecado, el cual ha estado colgado por detrás del mismo hasta hace varios años.
El motivo por el que la mano de plata se le quitó al Simpecado es que estaba colgado del forro de detrás, el cual se estaba rompiendo por el peso de este exvoto. La Hermandad todavía conserva dicha mano con gran cariño.

· La margarita


Antiguamente, las niñas de las familias con dinero que no tenían que trabajar, se entretenían bordando o haciendo otros trabajos manuales. A estas familias pertenecía la familia Llorente, fundador de nuestra Hermandad. Esta familia tenía varias hijas, las cuales hacían sus propias labores de bordado, entre las que hacía margaritas. Toda niña rica tenía que tener su propia margarita bordada. Un día una de estas niñas se puso muy enferma y su padre colocó en el Simpecado la margarita de esta niña, pero esta vez no pudo ser y la niña murió. Desde entonces el Simpecado ha llevado esa margarita en recuerdo de esta niña.
La margarita lo ha llevado el Simpecado hasta el año 1.997, año en que fue restaurado. La margarita sigue en posesión de la Hermandad.

· El cambio de medalla entre los Hermanos Mayores

La medalla del Hermano Mayor no es igual a todos los hermanos de la Hermandad. Esta parece ser que es la medalla antigua de la Hermandad de Triana.
La Hermandad de Sanlúcar la Mayor es la única Hermandad en la que el Hermano Mayor entrante y saliente se cambian las medallas durante la procesión de la Virgen del Rocío, cuando está delante de nuestro Simpecado. Esto viene sucediendo desde la romería del año 1.944. En este tiempo eran muchos menos que ahora los peregrinos que iban al Rocío. Los sacerdotes no se subían en hombros para rezar la Salve cuando estaba la Virgen delante del Simpecado, sino que era la Virgen la que se ponía en el suelo. Este año era Hermano Mayor D. Eustaquio Sousa Castaño y quería que fuese el siguiente su sobrino D. José Morales Sousa, pero este no quería ser Hermano Mayor.

D. Eustaquio esperó a que pusieran a la Virgen en el suelo para rezar la Salve delante del Simpecado y ponerle la medalla de Hermano Mayor, sabiendo que delante de Ella no podría decir que no a dicho cargo. Desde entonces este gesto se viene repitiendo cada lunes de Pentecostés durante la procesión de la Virgen del Rocío ante nuestro Simpecado. Debido a la cantidad de personas que hay ahora durante la procesión, la Virgen ya no se pone en el suelo, sino que es levantado en hombros no solo el sacerdote para rezar la Salve, sino también los dos Hermanos Mayores.

EL CAMINO DEL ROCIO DE NUESTRA HERMANDAD

EL CAMINO PARA EL ROCÍO

El itinerario que lleva la peregrinación a la Aldea se inicia el jueves anterior a Pentecostés, después de la Misa de Romeros celebrada en la Parroquia de Santa María la Mayor, a las ocho de la mañana. Antes de salir del pueblo recorremos las calles de Sanlúcar con gran alegría y despidiéndonos de muchas personas. Lo que nunca falta es la visita de nuestro Simpecado a la residencia de ancianos “San Eustaquio”, los cuales nos esperan con un gran entusiasmo.
Continuamos nuestro camino para El Rocío pasando por el pueblo vecino de Benacazón, en donde nuestro Simpecado se dirige a la Parroquia para rezar ante la Virgen de las Nieves. Seguimos hacia Marlo, para sestear. Cuando levantamos el campo nos espera el “Vado de Quema”, en donde todo se vive de una manera muy especial y se suceden los bautizos rocieros. La primera pernocta la hacemos en “El Chaparral” de Villamanrique.
Por la mañana nos ponemos en camino rezando el Santo Rosario, presentándonos por la mañana muy temprano ante la Hermandad del Rocío de Villamanrique. Dejamos atrás la Venta Mauro y nos adentramos en Doñana por la finca “Las Mulas”, la finca “Cabezarrasa” y venimos a enlazar con el camino de Hinojos. En estas fincas últimas la Hermandad se hace más Hermandad todavía si cabe porque somos la única Hermandad de las que peregrinan al Rocío que pasan por dichas fincas. A lo largo del camino de Hinojos nos solemos encontrar con la Hermandad de Hinojos. Es este encuentro muy emotivo en donde no se para de cantar, bailar, etc. Los Simpecados se ponen de frente uno al otro y se reza la Salve. La pintura que tienen los dos Simpecados en el centro están pintados por el mismo autor, Santiago Martínez, por lo que son muy parecidas.
Por el camino de Hinojos llegamos al antiguo cuartel de “El Moralejo” en donde se acampa. Se celebra la Santa Misa a media noche en donde los carros están situados en círculo alrededor de la carreta del Simpecado.
El sábado por la mañana se reza el Santo Rosario detrás de la carreta del Simpecado mientras vamos caminando hacia la Aldea, para llegar al puente del Ajolí sobre las 9:30 de la mañana. Aquí se reza la Salve de Acción de Gracias por haber llegado a “sus plantas”. Después se colocan los carros en el terreno que previamente se ha reservado para estar los dos días. La presentación ante Nuestra Amantísima Titular la Virgen del Rocío se hace entre las 15:00 horas a 16:00 horas.
Entre los actos que merecen ser destacados sobresalen: la presentación de las Hermandades ante la Hermandad Matriz, la Santa Misa el domingo por la mañana y el rezo del Santo Rosario, en donde a nuestro Simpecado le acompañan muchas personas portando bengalas y velas. Al terminar el Rosario y la Hermandad Matriz hace su entrada en la Ermita es cuando se produce “el salto a la reja” de los almonteños para pasear a “su Virgen” por el itinerario centenario, paseándose la Virgen y rezando la Salve ante los 105 Simpecados de las distintas Hermandades.
El momento cumbre de nuestra Hermandad es cuando la Virgen del Rocío se queda inmóvil ante Nuestro Simpecado. En ese momento se produce uno de los actos más importante, emotividad y confraternidad dentro de nuestra Hermandad, “el cambio de medallas entre los Hermanos Mayores, entrante y saliente”, que tienen lugar después del rezo de la Salve, a hombros y en presencia de Ella, acto único en el Rocío, ya que hay tres personas elevadas: el sacerdote y los dos Hermanos Mayores.
La vuelta de la Hermandad del Rocío hasta nuestro pueblo es igual, llegando el miércoles después de Pentecostés sobre las 21:00 horas. Esta entrada en el pueblo es muy especial. Para esta entrada las flamencas reservan sus mejores trajes, ellos también, la carreta del Simpecado se engalana muy especialmente y suenan cohetes sin parar. Todo el mundo andando alrededor del Simpecado, todo el pueblo esperándonos a la entrada, muchos chiquillos se adelantan hasta Benacazón porque no pueden alargar más la espera, etc. Este día se unen muchos sentimientos, los que se llevan por el camino y los que se han quedado aquí porque no han podido ir. Al llegar a la Parroquia de Santa María la Mayor se produce el intercambio de medallas entre el Hermano Mayor entrante y el Hermano Mayor saliente.

viernes, 25 de enero de 2008

NUESTRO SIMPECADO

EL SIMPECADO
En 1.940 se manda a hacer el Simpecado en los talleres de Dª Esperanza Elena Caro, realizado sobre terciopelo azul marino bordado profusamente y de forma magistral en oro. De corte tradicional y de perfecta forma, guarda una singular armonía estética. En su centro aparece la Virgen en bella y colorista pintura, siendo el óleo de la Santísima Virgen del Rocío obra del pintor D. Santiago Martínez, que va orlada por un ancho y vistoso entramado de flores y hojas que componen el dibujo del bordado. Ostentando bajo el óvalo donde se inserta el óleo mariano encontramos el escudo de armas de España en seda de colores, con la adición en uno de sus cuarteles del característico corazón,timbrado por la Corona Real cerrada. Asimismo, las puntas del Simpecado van bordadas en oro de manera simétrica, guardando perfecta relación con el trabajo artesanal de de toda la obra.
Su importe total fue de 14.000 pesetas y donado por D. Felipe Llorente Torroba. La vara del que pende es de orfebrería rematada en la cruz de la que cuelga un cordón que se anuda en los remates de los travesaños y cae en sendos borlones que también llevan las puntas de la enseña. Este Simpecado lo entregó Dª Esperanza a la Hermandad al año siguiente de su encargo. Podemos decir que es uno de los más valiosos Simpecados que acuden a la Romería del Rocío.
El Simpecado ha sufrido dos restauraciones, la primera en el año 1.978, siendo Hermano Mayor D. Rafael Sousa Morales, pasándole su bordado y el lienzo central a un nuevo terciopelo, llevándose esta operación en los mismos talleres donde se hizo.
La otra restauración se realiza en los talleres de Dª Piedad Muñoz, alumna aventajada de Elena Caro, en Albaida del Aljarafe en el año 1.997. Se le vuelve a colocar nuevo terciopelo, que nos cedió la Hermandad de Montserrat de Sevilla, que lo habían traído de Lyon, y se pasan y restauran los bordados. El importe de dicha restauración ascendió a 1.300.000 pesetas. Entonces era Hermano Mayor D. José Manuel Luque Rodríguez. Las donaciones para su restauración fueron: el terciopelo Dª Encarna Hernández Gutiérrez, el forro Dª Rosario Sousa Carmona, las borlas del cordón Dª Dolores Martín Camacho y Dª Encarna Carmona Hernández, las borlas del Simpecado Dª María José Luque González y un pie de hierro para colocar el Simpecado en el suelo Dº José Martínez Clavijo. La pintura también fue restaurada por la empresa PROARTE.
En el año 2.005 se le cambia al Simpecado el forro de detrás y las borlas, debido al mal estado en que se encontraban tras la romería de dicho año. Este trabajo lo realiza Dª Piedad Muñoz en la Escuela-Taller de la Hermandad de la Vera-Cruz de Sanlúcar la Mayor
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Si se observa bien el escudo de España del Simpecado, se puede ver que lleva un corazón latente, que no aparece en el escudo oficial actual.

La Hermandad se fundó en el año 1940, un año después de terminar la Guerra Civil Española. Su origen asciende a la tercera gerra carlista que sufrió nuestro país a finales del siglo XIX. D. Alfonso Carlos de Borbón y Austria-Este reclamaba el trono de España. Su divisa era el "DIOS-PATRIA-REY" y sus emblemas guerreros la Inmaculada Concepción y el Sagrado Corazón de Jesús, con el "detente-bala" grabado en el pecho, cerca del corazón. Los requetés de la Guerra Civil Española copiaron ese símbolo heredado de sus abuelos. El mismo D. Alfonso Carlos I, en una reunión celebrada en Toulouse el 3 de junio de 1932, prometió que si algún día llegaba a reinar, incorporaría el Sagrado Corazón al escudo nacional español.

El Simpecado de nuestra Hermandad, junto con el de la Hermandad de Huelva, son los únicos que llevan este escudo. De hecho, el Simpecado actual de Huelva se estrenó en el año 1.939, siendo Hermano Mayor el Tercio de Requetés de Ntra. Sra. del Rocío, de Huelva.

NUESTRA CARRETA DEL SIMPECADO

LA CARRETA
La primera romería la hace la Hermandad en el año 1.942 con el Simpecado transportado al Rocío en una carreta de madera, realizada por D. Félix Macías Vizcaíno, hasta que en el año 1.947 se estrena la nueva, y actual, carreta, siendo la orfebrería de los talleres de D. Eduardo Seco Imbert. Su importe total fue de 15.000 pesetas, las cuales fueron pagadas en dos plazos de 7.500 pesetas. Las maderas para su construcción las donaron las siguientes personas: D. Felipe Pablo-Romero y Llosent, para las ruedas, D. Carlos Melgarejo Osborne, limones y cedro, D. Luis Hepbun Fernández, las llantas, D. Rafael Acosta Romero, varios herrajes, D. Manuel Sánchez-Palencia López, el eje de las ruedas, D. Manuel Pacheco, tablón para el yugo, Sra. Vda. de D. Julio Morillo e hijos, madera para el cajón, el maestro carpintero Vargas, la construcción del yugo, y D. Rafael Borrego Hernández la maquinaria empleada y la pintura.
El templete consta de seis columnas, rematadas en banquillos, que sostienen la bóveda de cañón del techo. Esta va recubierto interiormente de terciopelo rojo con apliques de plata y lleva arcadas laterales, de las que penden campanillas. En el frontispicio destaca una cartela con el escudo de la ciudad de Sanlúcar la Mayor y una Paloma en lo alto del arco. La carreta se completa con un juego de jarras y candelabros, figurando en su parte delantera una imagen de San Eustaquio, patrón de la ciudad. En cuanto a los atavíos de los bueyes conserva la Hermandad unos preciosos frontiles de plata cincelada, con los escudos de los ganaderos de la comarca, recordando en cierto modo los antiguos, sobre los que destacaban los frutos y productos principales de la comarca aljarafeña.
En el año 1.988 se le hace una restauración a la carreta en la que se sustituye el armazón del techo de madera a estructura de hierro, así como el interior de las columnas, por el maestro herrero de la localidad Sr. Iglesias, sometiéndosele a un plateado, de la cual no se tienen noticias en dónde se realizó.
Cuando se llega de la romería del año 2.001, se decide acometer la restauración de la carreta del Simpecado. Dicho trabajo se le encarga a D. José Jiménez e hijo. Se realiza también el lecho de la carreta, ya que se encontraba en muy mal estado. Este trabajo se realiza en los talleres de Pedro Guzmán en Bollullos de la Mitación, previo presupuesto de 9.000 €. El importe de la restauración de la orfebrería se eleva a 25.000 €. De este modo para la romería del año 2.002 se estrena toda la carreta prácticamente nueva.
Nuestra Hermandad siempre ha tenido bueyes propios, los cuales fueron regalados por ganaderos de la zona del Aljarafe, entre ellos están los Duques de San Fernando. Estos regalaron una yunta de bueyes a la Hermandad en el año 1.973. Estos bueyes eran cuidados y entrenados por hermanos de la Hermandad, así como llevar la carreta del Simpecado en romería hacia El Rocío. Esto fue así hasta que en el año 2.004 la Junta de Gobierno decide no tener más bueyes en propiedad, ya que no hay nadie que se haga cargo de su cuidado a lo largo del año y después había que contratar a un boyero para la romería.

REUNIÓN PARA LOS INTERESADOS EN CONSEGUIR UN APARTAMENTO EN LA CASA-HERMANDAD DEL ROCÍO

La Hermandad organiza hoy, 25 de enero 2007, en el salón parroquial una Asamblea informativa dirigida a todos los hermanos de nuestra Hermandad sobre cómo conseguir un apartamento en la casa-hermandad del Rocío. Dicha Asamblea dará comienzo a las 21:00 de la noche. Estarán presentes el arquitecto, el aparejador, el economista y toda la Junta de Gobierno de la Hermandad.

ORIGEN E HISTORIA DE LA HERMANDAD DE SANLÚCAR LA MAYOR

ORIGEN E HISTORIA DE LA HERMANDAD

Sanlúcar la Mayor es una población que por motivos arqueológicos, etnográficos y que debido a la situación geográfica en el Aljarafe, estuvo relacionada culturalmente con la comarca y con toda la tierra rociera desde épocas prehistóricas.
La tradición rociera de este pueblo del corazón del Aljarafe se remonta a finales del siglo XIX y principios del XX, en los que se recuerdan que grupos de romeros iban ya al Rocío haciendo el camino. Las comitivas no se unían a ninguna Hermandad del entorno, sino que hacían el camino independientemente, a través de Villamanrique y por la Raya Real, acampando durante dichas fiestas frente a la Madre de las Rocinas, y al amparo de los viejos acebuches que había por aquel entonces en la puerta de los Milagros, del anterior Santuario. Posteriormente, algunos de estos grupos con sus carros se fueron uniendo a Hermandades de los pueblos vecinos que ya estaban formados en Hermandad rociera, como en los casos de Pilas, Umbrete, Benacazón u Olivares.
Pero no es hasta el año 1.940, cuando un grupo de amigos rocieros de Sanlúcar la Mayor se reúnen en la finca “Guadiamar” en el término municipal de Sanlúcar la Mayor, y propiedad de D. Felipe Llorente Torroba, en donde acuerdan dar los pasos pertinentes para constituir en Hermandad el espíritu rociero que ya era un hecho en nuestro pueblo. El grupo estaba formado entre otros por el titular de la finca, D. Felipe Llorente Torroba, D. Manuel Sánchez-Palencia López, D. Antonio Sánchez- Palencia, D. Félix Macías Gregorio, D. Juan Sánchez-Palencia López, D. Feliciano Flores Monis y D. Antonio Gil Bueno.
El acta fundacional, en poder de la Hermandad, por la que se eleva a la aceptación del Sr. Cura-Arcipreste de la población, para su posterior presentación a las Autoridades Eclesiásticas Superiores, dice lo siguiente:

Ante el altar de la Stma. Virgen del Rocío, en su Santuario de las marismas de Almonte, nos hemos mostrado reverentes, los que al margen se indican venidos a visitar a esta Blanca Paloma y ofrendarle la nueva Hermandad de Su Santo Nombre y ferviente devoción, de Sanlúcar la Mayor que tenemos acordado constituir, autorizados por la Jurisdicción Eclesiástica y para que se considere erigida en la nueva Capilla de Su Título de la Dehesa Guadiamar, sujeta a las Reglas de las de su clase.
Empieza la Hermandad con los Hermanos Fundadores que al pié de la presente figurarán y será sometida este acta a la aprobación del Sr. Cura Párroco de Sanlúcar la Mayor.
Sea éste el primer acto de homenaje a la Reina y Señora de esta nueva Agrupación de Sus fervientes devotos, de tan distintas partes procedentes, de varias clases sociales y profesiones, unidos bajo la Santa Fe Cristiana que protestan creer y profesar y bajo la salvadora Bandera del amor a María Santísima, Madre Virgen de Dios, Reina de Cielos y Tierra, Medianera Universal en todas las gracias y privilegiada con las prerrogativas de la Concepción Inmaculada y la Asunción gloriosa.
Sea nuestra primera creación de Hermandad, Señora Bendita, nuestra consagración a Tu devoción y servicio, nuestro vehemente deseo el de cumplir la Ley de
Dios y ser hijos leales de la Iglesia, nuestra promesa la de propagar Tu devoción y culto y nuestras primeras súplicas para que aceleres la restauración de la Soberanía Social de Jesucristo, Tu Hijo y Señor Nuestro, en España y Su Paz en todo el mundo, por la prosperidad de Nuestra Madre la Iglesia y de nuestra querida Patria, por el mejoramiento en virtudes y piedad de nuestras vidas y las de nuestras familias y porque en esta Tu devoción salvadora logremos los mayores consuelos y la inefable dicha de hijos Tuyos sobre los que pongas Tu mano de protección, Amén.
Santuario de la Virgen del Rocío, domingo diecinueve de Enero de mil novecientos cuarenta y uno.”

Están las firmas de: D. Felipe Llorente Torroba, D. Manuel Sánchez-Palencia, D. Antonio Sánchez-Palencia, D. Antonio Gil Bueno, D. Juan Sánchez-Palencia y D. Feliciano Flores Monis y con el VºBº del Cura-Arcipreste, el 27 de enero de 1.941, Dr. Andrés Galindo. Figura el sello de la Parroquia.
Se redactan los estatutos que regirán a la futura hermandad presentándose en el Palacio Arzobispal para su aprobación.
Las primeras reglas se firman y autorizan por el ILMO. Sr. Teniente Vicario General del Arzobispado, D. Manuel Gómez Rodríguez, el 19 de Junio de 1.941, Canónigo de la Santa Iglesia Metropolitana y Patriarcal, por mandato del Eminentísimo Sr. D. Pedro Segura y Sáenz, Cardenal-Arzobispo de Sevilla, con el visto bueno del Licenciado D. José Antonio Herrera, notario ecónomo de la misma.
Siendo al año siguiente cuando se hace por primera vez el camino constituida como Hermandad Filial de la Hermandad Matriz de Almonte, obteniendo el número 26 de las Hermandades que peregrinan a la Aldea. La Hermandad de Sanlúcar la Mayor es amadrinada a su entrada ante la Blanca Paloma por la Pontificia, Real, Ilustre, Fervorosa y Antigua Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Triana (Sevilla). Siendo su primer Hermano Mayor D. Manuel Sánchez-Palencia López.
Desde el año de su fundación la Hermandad del Rocío de Sanlúcar la Mayor no ha dejado de acudir por Pentecostés ni un solo año para honrar y alabar a la Reina de las Marismas.
En el año de 1.940 se manda hacer el Simpecado en los talleres de Dª Esperanza Elena Caro. Su importe total fue de 14.000 pesetas, donado por D. Felipe Llorente Torroba. La vara de orfebrería de la que pende el Simpecado es de dicho año también.
La primera romería la hace la Hermandad en el año 1.942 en una carreta de madera. Hasta el año 1.947 no se estrena la nueva carreta actual, siendo realizado por D. Eduardo Seco Imbert y cuyo importe ascendió a 15.000 pesetas. Este pago se hizo en dos veces de 7.500 pesetas cada vez. Las maderas fueron donadas por distintas personas del pueblo.
A principios de los años 50, el Hermano Mayor de entonces, D. Pedro Mª Llorente Zuazola, autoriza a D. José Sousa Morales, a D. José Pazo López y a D. José Manuel Sánchez-Palencia Pacheco para que hagan las gestiones pertinentes para la adquisición de una choza en la Plaza del Acebuchal. En el año 1.955 se pudo hacer una casa-hermandad de ladrillo, que es todavía la que tenemos actualmente. Estamos pendiente de su remodelación.


En el año 1.973, la Hermandad decide comprar una habitación en Sanlúcar para una casa-hermandad en el pueblo. Dicha casa-hermandad está situada en la calle Juan Carlos I, número 8.
En el mismo año, D. Felipe Llorente Zuazola dona una imagen de la Virgen del Rocío a nuestra Hermandad. Desde entonces se saca por las calles de Sanlúcar como colofón de los actos litúrgicos que con motivo de la preparación al encuentro con Nuestra Titular en la Aldea se ha puesto como tradición.
En el año 1.994 la Hermandad manda a realizar el estandarte o “bacalao”, del que la Hermandad carecía y es utilizado para los acontecimientos en los que no es necesario sacar el Simpecado para, de esta forma, protegerlo.
En el año 1.999 se realiza en los talleres de Villarreal las cartelas en plata del libro de Reglas sobre terciopelo del color del Simpecado, se hace la encuadernación y nuevas páginas del mismo, ya que la Hermandad carecía del mismo.
En el año 2.002 le es concedida a la Hermandad por el Excmo. Ayuntamiento de Sanlúcar la Mayor la Medalla de la Ciudad, por la labor que realiza en pro del pueblo.
El día 9 de octubre de 2.004, y después de un Triduo de preparación, y de la Función Principal de Instituto que se lleva a cabo en la puerta del Ayuntamiento, con gran ornamentación de flores y los Pendones del Ayuntamiento colgados de los balcones, para conmemorar el CL Aniversario del Dogma de la Inmaculada Concepción y la entrega por el Alcalde de la Ciudad de la Medalla concedida en 2.002, se realiza la I Salida Extraordinaria del Simpecado en su Carreta por las calles del pueblo de Sanlúcar. Dicho acontecimiento fue seguido por todos los sanluqueños por su itinerario con gran alegría y satisfacción. Todo esto fue considerado como un día memorable en la Historia de la Hermandad.
El día 17 de febrero del año 2.007 se celebró en Sanlúcar la Mayor la Asamblea Comarcal de Hermandades del Rocío de la Archidiócesis de la provincia de Sevilla. Nuestra Hermandad de Sanlúcar la Mayor fue la anfitriona y quien organizó todo el evento. A esta asamblea asistieron las hermandades de los siguientes lugares: Almonte, Villamanrique, Pilas, Triana, Umbrete, Coria del Río, Carrión de los Céspedes, Benacazón, Gines, Dos Hermanas, Olivares, La Puebla del Río, Espartinas, Sanlúcar la Mayor, Bollullos de la Mitación, Sevilla, Huevar del Aljarafe, Aznalcázar, Villanueva del Ariscal, Los Palacios y Villafranca, Écija, Bormujos, Camas, Lebrija, Alcalá de Guadaíra, Tocina, Gelves, Utrera, Cerro del Águila, Sevilla Sur, Almensilla, Las Cabezas de San Juan, Osuna, Santiponce, Mairena del Alcor, Carmona, Sevilla Macarena, La Algaba, Tomares, Mairena del Aljarafe, Palomares del Río, Lucena de Córdoba, Las Palmas de Gran Canaria, Granada, Cabra, Málaga, Puente Genil, Jaén, Marbella, Almería, Fuengirola, Valencia, Málaga La Caleta, Murcia, Benidorm, Garrucha (Almería), Linares, Morón de la Frontera, Castrense de Tablada, Melilla y Salteras.

miércoles, 23 de enero de 2008

Hermandad del Rocío de Sanlúcar la Mayor (No oficial)

Soy un hermano de la Hermandad del Rocío de Sanlúcar la Mayor y he creado este blog para expresar mis sentimientos con otros rocieros del mundo y dar a conocer mi Hermandad y su labor.
http://www.boosterblog.es